
El reconocido actor y cineasta Kevin Costner ha sido acusado legalmente por Devyn LaBella, una doble de acción que participó en la filmación de su proyecto Horizon. LaBella sostiene que fue presionada para grabar una escena de violación sin haber sido informada previamente ni haber otorgado su consentimiento, lo cual ha desatado cuestionamientos sobre las prácticas de seguridad en el set y la protección de los intérpretes durante escenas delicadas.
Costner ha rechazado las acusaciones, asegurando que LaBella estuvo al tanto de la escena y que incluso mostró conformidad con el trabajo realizado. Aunque el proceso judicial se encuentra en una fase inicial, el caso ha generado un renovado debate en Hollywood sobre la responsabilidad de las producciones en el manejo de escenas íntimas y la necesidad de protocolos claros para garantizar el consentimiento informado.